La dermatitis atópica (DA) es un proceso inflamatorio de la piel caracterizado por intenso prurito y piel seca, que presenta una evolución crónica y cursa en forma de brotes.
Es la enfermedad crónica de la piel más frecuente en la infancia.
El pediatra establecerá un diagnóstico de sospecha ante una dermatitis con intenso prurito con carácter persistente o recurrente, debiendo recomendar la consulta con Dermatología. E
El tratamiento de la dermatitis atópica debe ir dirigido a reducir los síntomas (prurito cutáneo y eccema), prevenir las exacerbaciones y minimizar los riesgos del tratamiento. Es complicado lograr un control óptimo de los síntomas.
Los dos pilares fundamentales en el tratamiento médico de la dermatitis atópica son la hidratación adecuada de la piel y el uso de corticoides tópicos.
El Dermatólogo orientara a los padres y/o entorno del paciente sobre el correcto cuidado de la piel del paciente Atópico